Sin duda los efectos del cambio climático se están haciendo sentir en la región, especialmente en lo que respecta al recurso hídrico. Es por esto que desde el Gobierno se han tomado medidas, bajo alianzas público-privadas, que garantizan el funcionamiento en tres vitales áreas: el suministro eléctrico en la región, el consumo de agua potable y el regadío agrícola.

De esta forma, el Intendente Jorge Calderón Núñez se refirió a la importancia que tiene tomar medidas estructurales, tanto a corto, mediano y largo plazo, en esta materia. “Lo que estamos haciendo como Gobierno es generar medidas que no sólo nos ayuden a trabajar desde la coyuntura, sino que también desde el punto de vista estructural. Hemos trabajado en una alianza público-privada multisectorial que nos permita, primero, asegurar el suministro eléctrico, segundo, garantizar el acceso a agua potable, y trabajar estructuralmente la situación en los campos, aumentando la superficie de riego y el riego tecnificado, permitiendo así ampliar la cantidad de praderas para forraje, mediante del establecimiento de una cultura adecuada de riego”.

Es así como en diferentes reuniones de trabajo con el Gobierno, las empresas que proveen de energía eléctrica y agua potable en los sectores urbanos de la región han declarado que el suministro de ambos servicios está garantizado, tanto para el sector habitacional como industrial. Y en ese mismo sentido, en los sectores rurales, el Gobierno ha impulsado una serie de trabajos que cumplen con estas mismas necesidades, como son el mejoramiento, la ampliación y construcción de Sistemas de Agua Potable Rural.

Asimismo, en el sector agrícola, el Gobierno, principalmente bajo el trabajo del Ministerio de Agricultura, está impulsando diversos instrumentos de fomento que optimizan el riego y drenaje de los suelos fértiles. De esta forma, se está invirtiendo en obras civiles de creación, ampliación y tecnificación de regadío, proyectos financiados vía Ley de Fomento al Riego, por programas de INDAP y de la Comisión Nacional de Riego.

Desde el Gobierno afirman que este es un problema complejo, pero que las medidas que se están tomando van en la dirección de generar el menor impacto posible, tanto a niveles áreas productivas como en los hogares de los habitantes de la Región de Aysén.